Refugiados en residencias de ancianos de Viena: ¡Las personas mayores esperan en vano una plaza!
En Margareten, los refugiados son alojados en residencias de ancianos desde 2015, lo que ha provocado conflictos con las personas mayores. Desarrollos y desafíos actuales.

Refugiados en residencias de ancianos de Viena: ¡Las personas mayores esperan en vano una plaza!
La situación en Viena ha empeorado en los últimos años: cada vez más refugiados y desplazados llegan a las residencias de ancianos de la ciudad. Según un informe de expresar Esta evolución se viene observando desde 2015. Mientras que las plazas para personas mayores suelen tardar años en llegar, los solicitantes de asilo pueden mudarse en muy poco tiempo. Esto provoca resentimiento entre los ciudadanos mayores, que a menudo se sienten abandonados.
La situación ha empeorado, especialmente desde el estallido de la guerra en Ucrania en febrero de 2022: unas 100 familias ucranianas han sido alojadas en residencias de ancianos en Viena. Actualmente, los refugiados reciben apoyo en siete casas, incluidos solicitantes de asilo de países como Siria, Irak y Afganistán. Un informe de los auditores de la ciudad señala que quienes tienen derecho a asilo a menudo tienen que permanecer en sus hogares más de los cuatro meses previstos. Hay una excepción para los ucranianos: permanecen allí hasta que puedan regresar a su patria.
Los desafíos del alojamiento
Alojar a refugiados en residencias de ancianos no sólo supone un desafío emocional sino también financiero para las instalaciones. En 2023, la Casa Döbling registró un déficit de casi 92.000 euros porque no se cubrieron los costes de las plazas "ocupadas incorrectamente". Los proveedores subrayan que el alojamiento de los solicitantes de asilo supone una carga para los recursos de las residencias de ancianos y reduce el número de plazas disponibles para las personas mayores.
Alto dstgb Los conflictos por la vivienda y los servicios sociales se han vuelto significativamente más intensos. Muchos municipios se ven obligados a encontrar nuevas soluciones para acoger a los refugiados. Las dificultades surgen a menudo de una comunicación insuficiente entre las distintas partes implicadas: refugiados, residentes, operadores de alojamiento y políticos locales. Por lo tanto, el informe de investigación sobre este tema llama a la participación ciudadana integral y al desarrollo de estrategias para prevenir la violencia y resolver conflictos.
La responsabilidad hacia los más débiles
El trato a los refugiados en residencias de ancianos también plantea dudas sobre la responsabilidad. Si bien desde 2015 las casas han asumido una especie de función protectora para las personas vulnerables, la pregunta sigue siendo cuánto tiempo esto podrá funcionar a expensas de sus propias personas mayores. La iniciativa de la ciudad “Casas para vivir” ha asumido un papel responsable en este ámbito, pero está llegando a sus límites.
Nos esperan importantes desafíos. La distribución y el alojamiento de los refugiados en Viena podrían complicarse aún más a medida que aumente el número de solicitantes de asilo. Queda esperar que la ciudad y las instituciones afectadas trabajen juntas para encontrar soluciones que satisfagan las necesidades tanto de la población mayor como de los refugiados vulnerables.
Además, los informes del Ministerio Federal de la Familia, las Personas Mayores, la Mujer y la Juventud, que ha publicado normas mínimas para la protección de los refugiados en los alojamientos, proporcionan recomendaciones adicionales para la acción. Éstos son necesarios para promover la integración y la convivencia de todos los involucrados y evitar conflictos. Los interesados pueden encontrar más información en la página web del ministerio. bmfsfj.