¡La policía financiera descubre violaciones de laboratorio en la tienda Labubu!
La policía financiera controla una tienda temporal en el centro de Viena por violaciones de la legislación laboral y sospechas de falsificación.

¡La policía financiera descubre violaciones de laboratorio en la tienda Labubu!
En Viena está causando mucho revuelo el revuelo que rodea a los monstruosos muñecos de peluche “Labubu”, que admiten perros y que son importados de China. Pero la alegría por las coloridas figuras podría desvanecerse rápidamente después de que la policía financiera inspeccionara una tienda temporal en el centro de la ciudad la semana pasada. mensajero informó. Durante la inspección se descubrieron varias violaciones de las normas del mercado laboral, lo que reveló la nada eufórica realidad detrás del comportamiento de ventas.
No es muy alentador: la tienda tiene atrasos en impuestos exigibles de casi 3.300 euros. Según los funcionarios, incluso existe la sospecha de que en lugar del codiciado "Labubus", el llamado "Lafufus", se venden falsificaciones. Estos hallazgos no son una coincidencia, ya que la inspección se llevó a cabo después de un informe escrito de la oficina del mercado. La situación tiene el potencial de dañar significativamente la imagen positiva que la marca quiere reivindicar.
El fiasco legal
Cuando se comprobaron las condiciones laborales en la tienda, resultó que un empleado figuraba como trabajador a tiempo parcial, pero no tenía un permiso de trabajo válido. Aún más preocupante es que el gerente de la tienda y el gerente general no pudieron proporcionar registros de tiempo. Esto hace sospechar que aquí no todo va bien, sobre todo porque a los clientes no se les entregó ningún recibo al realizar la compra y la caja registradora no fue registrada a través de FinanzOnline.
Con una facturación mensual de unos 43.000 euros en agosto de 2025, la empresa no sólo no puede evitar elevadas deudas fiscales, sino que también debe esperar sanciones de unos 5.000 euros. También existe el riesgo de nuevas sanciones financieras de hasta 15.000 euros, que podrían imponerse en el marco de investigaciones fiscales en curso. En este contexto, el Ministro de Finanzas, Markus Marterbauer, dejó claro lo importante que es defendernos contra el fraude fiscal.
El panorama general
Los problemas de evasión fiscal no se limitan sólo a la pop-up store de Viena. Cómo Ferner-Alsdorf Resulta que el comercio internacional en línea en particular es un tema candente. Una sentencia del Tribunal Federal de Justicia de 2020 arroja luz sobre el problema de la evasión del impuesto sobre las ventas por parte de los vendedores online, que a menudo utilizan una red de empresas buzón. Esta modalidad de fraude significa que las autoridades fiscales toman conocimiento de la evasión a través de informes de actividades sospechosas y cooperación internacional.
En el caso de las falsificaciones de Labubus, podría surgir un patrón similar: el impuesto sobre las ventas o no se declara en absoluto o sólo de forma incompleta, lo que lleva a las autoridades investigadoras al lugar. El Tribunal Federal de Justicia ha dictaminado a este respecto que los importes evadidos deben confiscarse como producto del impuesto, lo que deja clara la dimensión de las consecuencias estrictas. La gravedad de la situación se refleja, entre otras cosas, en la elevada cuantía de los daños, que en estos casos suelen ser sistemáticamente graves.
En resumen, la tienda vienesa “Labubu” camina sobre una cuerda delgada mientras intenta sacar provecho del revuelo que rodea a sus productos sin tener en cuenta el marco legal. Queda por ver si la magia de estos monstruos de peluche durará, pero una cosa es segura: por motivos fiscales, el viento sopla más fuerte de lo esperado.