¡Investigadores vieneses descubren un nuevo método para combatir las crisis de epilepsia!
La Universidad de Medicina de Viena está investigando un nuevo enfoque terapéutico contra la epilepsia para comprender las causas de las convulsiones.

¡Investigadores vieneses descubren un nuevo método para combatir las crisis de epilepsia!
Un nuevo enfoque en la investigación de la epilepsia aporta un soplo de aire fresco al tratamiento de esta enfermedad tan extendida. Alrededor de 65 millones de personas en todo el mundo padecen epilepsia, una enfermedad causada por una alteración en el control de la excitación de las células cerebrales. En un estudio reciente, la Universidad de Medicina de Viena descubrió un mecanismo molecular que podría desempeñar un papel crucial en el desarrollo de las crisis epilépticas. Este mecanismo, conocido como “ráfagas de despolarización paroxística” (PDS), se caracteriza por un aumento de la actividad eléctrica en las células nerviosas y se considera un precursor de las convulsiones. Como informa la Universidad de Medicina de Viena confirma la hipótesis de que el PDS también desempeña un papel central en el desarrollo de la enfermedad.
Los resultados del estudio muestran que el PDS se produce especialmente en el contexto de daños cerebrales, como después de un accidente cerebrovascular o una lesión cerebral traumática, y activa a corto plazo un mecanismo de protección en el hipocampo, que a largo plazo puede provocar descargas eléctricas similares a convulsiones. Hasta ahora, los ataques de epilepsia se trataban principalmente de forma sintomática para suprimirlos. Sin embargo, con nueva información del estudio publicado en el Journal of Neuroscience, puede ser posible desarrollar tratamientos preventivos para formas específicas de epilepsia. Según la Universidad de Medicina de Viena, ya se están planificando más estudios para avanzar en terapias fundamentales.
Una mirada detrás de escena de la investigación
El grupo de trabajo sobre epilepsia, dirigido por el Prof. Dr. med. J. Rémi, se preocupa por mejorar el diagnóstico, la terapia y la evaluación del pronóstico de la epilepsia. Además del PDS, la investigación también se centra en el análisis semiológico y la electroencefalografía (EEG) para clasificar y comprender mejor los diferentes tipos de convulsiones. Esto es crucial para el diagnóstico y localización de las zonas de origen de las convulsiones en las epilepsias focales.
Otro impulso hacia la innovación es evidente en el uso de las últimas tecnologías, como los procesos 3D y los métodos de inteligencia artificial para analizar las incautaciones. Estos enfoques, según LMU Klinikum, ayudan a comprender y mejorar los efectos de la epilepsia en la calidad de vida de los pacientes. La combinación de tecnología más moderna y una sólida investigación básica constituye una base prometedora para futuros desarrollos en la terapia de esta enfermedad neurológica crónica.
Por lo tanto, será fundamental realizar más investigaciones no sólo para tratar los síntomas de la epilepsia, sino también para combatir de forma sostenible sus causas. La luz al final del túnel para muchos de los afectados podría volverse más tangible gracias a estos nuevos hallazgos científicos.