El lunes 20 de junio de 2015, un trágico suceso sacudió la ciudad de Graz: un tiroteo en el que un conductor de 26 años conducía un SUV verde, un Daewoo Rexton, hacia Griesplatz y luego atravesó el centro de la ciudad. El devastador viaje comenzó a las 12:15 horas. y terminó frente a la comisaría de policía en Schmiedgasse, donde fue detenido el conductor, Alen R.. Trágicamente, tres personas, entre ellas un niño de cuatro años, murieron, mientras que otras 36 personas resultaron heridas, algunas de ellas de gravedad. Estos incidentes plantean dudas sobre la situación de seguridad en Austria y, en consecuencia, la reacción política en Viena es preocupante. Mi distrito informa que Se analizarán exhaustivamente las reacciones de la política vienesa ante este terrible acontecimiento.

El incidente fue investigado por autoridades de investigación como la policía, Interpol y la Oficina Federal para la Protección de la Constitución con el fin de aclarar posibles motivos religiosos. Alen R., que huyó a Austria con sus padres para escapar de la guerra de Bosnia, ya había sido denunciado por violencia doméstica. Durante el juicio afirmó que había actuado por miedo y se había retractado de sus creencias religiosas declaradas originalmente. Un informe diagnosticó esquizofrenia y trastornos de la personalidad. El 29 de septiembre de 2016, Alen R. recibió cadena perpetua tras ser declarado cuerdo. El 23 de septiembre de 2023 fue encontrado muerto en su celda; Se supone suicidio.

Reacciones políticas y el largo camino hacia la justicia

La reacción política a este incidente fue abrumadora. Inmediatamente surgieron en Viena numerosas voces que pedían un enfoque preventivo ante la cuestión de la seguridad y la violencia en la sociedad. El recuerdo de las víctimas de este ataque se expresó en actos conmemorativos, entre ellos una misa conmemorativa y una marcha conmemorativa en Graz, en la que participaron numerosas personas y representantes políticos. Esto demuestra que la sociedad no ha olvidado este incidente y todavía necesita una buena mano para afrontarlo.

Pero no es sólo el tiroteo en Graz lo que está en el centro de las discusiones sociales. Un análisis de la situación de la delincuencia en Austria muestra cifras alarmantes en 2023: se denunciaron alrededor de 528.000 delitos, el nivel más alto desde 2016. En Viena se produjeron más de un tercio de estos delitos, lo que preocupa a muchos vieneses. Statista informa que Los delitos relacionados con las drogas y las actividades cibercriminales en particular están aumentando.

Los críticos también cuestionan la investigación del tiroteo. Se critica la revisión inadecuada de la información y las pruebas. Si existe una conexión entre este incidente y el aumento de las tasas de criminalidad sigue siendo objeto de un intenso debate público. El 85% de los austriacos cree que los inmigrantes aumentan los problemas de delincuencia, lo que contribuye a un clima social tenso.

Política de seguridad de Viena: una mirada crítica hacia el futuro

El gobierno de la ciudad se toma en serio la situación de seguridad en Viena y existen repetidas iniciativas políticas destinadas a combatir el aumento de la delincuencia. Existe un deseo cada vez mayor entre la población de que la policía adopte mayores medidas contra el terrorismo islamista y el crimen organizado. Mi distrito resume que el 77% de la población confía en la policía, pero surgen dudas sobre la eficacia de las medidas.

Con el terrible alboroto y las consecuencias asociadas, la cuestión de la seguridad pública no descansará. Los políticos vieneses deben encontrar enfoques aceptables y eficaces para contrarrestar el crimen y abordar las preocupaciones de los ciudadanos. Un tema que seguirá siendo muy popular en el futuro.