¡Un camarero salva a un hombre de 86 años de asfixiarse en el restaurante Döblinger!
El 15 de noviembre de 2025, un empleado de un restaurante de Döbling salvó la vida de una mujer de 86 años que corría peligro de asfixia.

¡Un camarero salva a un hombre de 86 años de asfixiarse en el restaurante Döblinger!
El sábado 15 de noviembre de 2025 por la tarde tuvo lugar un dramático incidente en Nussdorfer Platz en Viena-Döbling. En un restaurante local, una señora de 86 años se desmayó después de amenazar con ahogarse con la comida. La llamada de emergencia se activó a las 14:15 horas, lo que inmediatamente provocó una alerta de primeros auxilios. Esto hizo que los servicios de emergencia, la policía y los bomberos respondieran inmediatamente a la alarma. Mi distrito informa que la situación era grave, pero la rápida intervención de un empleado del restaurante fue crucial.
Gracias al practicado agarre, también conocido como agarre de Heimlich, el empleado pudo salvar la vida de la señora. Poco antes de que llegaran los servicios de emergencia, la mujer volvió a tener el pulso estable y podía respirar por sí sola. El último desafío fue quitarle los restos de comida de la garganta, tarea que luego se hicieron cargo los rescatistas.
Un modelo a seguir en situaciones críticas
Estos incidentes son siempre un asunto grave, pero también demuestran el valor de una acción rápida y una buena formación. El empleado que demostró sus habilidades en una emergencia podría servir como modelo para todos los demás con su valiente intervención. Este tipo de esfuerzos demuestra que en la restauración no sólo sirve, sino que también se pueden salvar vidas.
El rápido despliegue y la amplia coordinación de los servicios de emergencia son una prueba más de la eficacia de los sistemas de emergencia de Viena. Gracias a la positiva cooperación, los rescatistas llegaron al lugar en muy poco tiempo y pudieron superar la crítica situación con profesionalidad.
En esos momentos nos damos cuenta dolorosamente de lo importante que es actuar con rapidez y prudencia en situaciones críticas. Los acontecimientos en Nussdorfer Platz también deberían recordarnos que debemos comprometernos más en la formación en primeros auxilios. Muchos establecimientos de restauración están empezando a formar a sus empleados en primeros auxilios, lo que no sólo resulta beneficioso en caso de emergencia, sino que también aumenta la sensación general de seguridad.
Este incidente no debe verse como un caso aislado. Existen muchas iniciativas encaminadas a formar a la población en primeros auxilios para poder afrontar mejor situaciones tan críticas en el futuro. La sociedad altamente inclusiva que prevalece en Viena es otro aspecto que puede mostrar lo importante que es estar unos para otros y permanecer juntos en caso de emergencia.